Apareció.

Sólo encuentro el delirio de escribirte tantas, ciertas cosas.
Sólo encuentro la ilución de extrañarte de vez en diario.
Sólo encuentro las ganas de besarte, de abrazarte, de pensarte.
Sólo quisiera encontrarte entre tanto mar de emociones y pensamientos hacia a ti.
Hacia ésto.
Sólo mi cuerpo puede encontrar el tuyo en un clima demasiado extasiado.
Sólo mi mano quiere encontrar la tuya.
Mi piel se derrite por tener el mínimo roce con tu voz, con tu delicada ternura.
Con tu pasión que es tan pasiva.
Que todo está medido y absolutamente cuidado.
Entre dos cuerpos desnudos, sólo existe esa respiración. Y ése lindo sonido que provoca un "Te quiero."
Mi alma estremeció al escuchar eso. Mi cuerpo ya no; estaba más revolcado entre tantas multitudes, multitudes que hacía tu peso encima de mi.
Sólo prometo hacerte muy feliz. Todo el tiempo que sea necesario y señalado por este pasaje.
Cabe aclarar que nada es pronto para nada.
Llega cuándo tiene qué llegar.
A lo mejor sé queda, para nunca tratar de olvidar.
Tanto que ni quiero que respires lejos de mi.

No hay comentarios: